sábado, 7 de julio de 2007

Estrenando botas

Ayer, tras muchos minutos desperdiciados sin dormir, logré conciliar el sueño…hasta que el pipipí pipipí del despertador me indicó que debía comenzar el día. A las 8.30 el Rubio estaba ya esperando y, sin más tardanza, salimos hacia la sierra.

Disfruta un ratito conmigo...







Esto son solo algunas cositas, me imagino que ya os haréis una idea.
Y sip, disfruté como una enana xD





A la Pedriza que me voy

En unas horas parto con rumbo conocido pero prácticamente no explorado –por mí-con mi Rubio preferido. Ilusa de mí.
Todos, absolutamente todos, sabemos que voy a ir detrás (muuuuuy detrás), a su sombra, esperando que me coja la mochila o me enseñe algún teleférico recóndito al que subir-pagando tasa previa- para apearme nada más llegar a la cima. No veo viable que me lleve a caballito.
Y estaré deseando todo el camino llegar arriba, ponerme ambas manos a la cadera, mirar el paisaje y respirar aire fresco.

Quien sabe, quizás mañana no hablemos, estaré por ahí perdida.
Y ahora, mientras preparo mi mini-macuto, solo pienso en la hora de deshacerlo.

Bueno, bueno, bueno… también sabemos que mañana disfrutaré mucho y que, probablemente le diga al Rubio que me lleve de nuevo el próximo fin de semana.

Mierda…no llevé a arreglar las gafas de sol, a ver que encuentro por casa…
Deseadme suerte y que no me queme, porfa porfa porfa!!!

miércoles, 4 de julio de 2007

Dentro del televisor

A principios de semana tuve la suerte de que mi Pachequitos me llevara a un programa de televisión para asistir como público. Cual niño pequeño, emocionada estaba de ver como era el interior de la tele; desmentir ese mito de los hombres pequeños que viven en nuestros televisores.

Quedamos en Aluche -hacía mucho que no pisaba esa plaza y me gustó ver de nuevo la fuente y el banco donde tantos ratitos esperé a que pasara el tiempo- como antaño, esperé paciente con mi mp3 a que llegarán mis acompañantes.

Nunca había visto el programa más de 7 u 8 minutos seguidos, por lo que mi idea de lo que me iba a encontrar era algo difusa. Al llegar al plató, observamos un auténtico caos.
La señora encargada de llevarnos y traernos, con voz desagradable, iba y venía sin parar.

Nos situaron en un lateral, en una plataforma a la que accedimos por unas siniestras escaleras, un amasijo de hierros que no transmitía ninguna seguridad.
Una vez colocados, dieron orden de dar palmadas al unísono y de practicar el “junco” en las baladas, hecho que nadie tuvo en cuenta pues cada uno llevó su propio ritmo en cada momento.

Los focos bailaban al son de la música y yo creo que a todos se nos quedó en el subconsciente aquel “prevenidos, prevenidos” antes de que las cámaras comenzaran a grabar.

Hubo buenos y no tan buenos momentos. En 2 ocasiones nos cambiaron de sitio para que quedara más bonita una canción; seguro que tú disfrutaste con la actuación, amigo espectador, no como nosotros, que tuvimos que apiñarnos en la última fila evitando pisar bolsos y botellas de agua sin llamar excesivamente la atención… xD

Bueno, al terminar, una multitud en oscuras buscaba el autocar número 6, con un Diego en el parabrisas, después de ir y venir un par de veces, dimos con nuestra guía de voz poco agraciada y nos subimos al autobús, expectantes de recibir la recompensa de 11 euricos por el trabajo realizado.

Decir que, después de no probar bocado desde las cinco y media de la tarde; el bocata de chorizo me supo a gloria; como sí de mi última cena se tratase, no dejé escapar miga alguna.

Dos de la madrugada; plaza de Cibeles…espero a mi búho, de nuevo con los cascos puestos, deseando llegar a casa y contaros que todo esto es mentira y que sí existen personajes que viven en nuestra televisión…creértelo o no, es cosa tuya.

Hoy no es mejor que ayer


Hay fotografías que el corazón se niega a enterrar, retazos de pasado que no quedan en la estantería acumulando polvo. A veces, se almacenan en grandes cajas sin apenas darte cuenta; a veces solo puedes guardarlos cuando otro recuerdo ocupa su lugar.

Y te sientes marioneta del destino, sin saber en qué puedes influir y en qué momentos dejarte llevar.

Hoy siento que mi vida es una barca.

domingo, 1 de julio de 2007

Adiós a mi abono naranja

Hoy es 1 de Julio, ¿alguien sabe qué significa esto? Yo te lo digo: que, definitivamente, mi abono naranja murió, y sumado a ello me acompaña la idea de que cada vez me alejo más de la niña que fui y me acerco a la persona adulta que casi todos tenemos en mente.
La cuestión es que, con 21 años, siento que mi vida esta insulsa: no he conseguido nada de los sueños que tenía dicha niña, me siento incompleta. Crecer es complicado.

Aunque, mejor pensar en positivo, y ver que 21 años no son nada, que tengo miles de puertas abiertas delante de mí y que el camino recorrido me a hecho ser como me ves ahora…si te lo tomas así, no ha salido tan mal, verdad?

Bueno, seguiré meditando ahora si adquiero el abono rojo con las consecuentes repercusiones para mi bolsillo xD.

Feliz día!!


P.D: Gracias por ese minuto de silencio que le dedicasteis!! jajaja

martes, 26 de junio de 2007

Apertura y comienzo


Y llegado el momento, lo mejor que puedes hacer es dejarte llevar; descalzar tus pies y disfrutar.


Feliz comienzo.